El escritor y académico de la Universidad de Chile Patricio Jara comenta el último libro traducido al español del periodista norteamericano Gay Talese: Bartleby y yo.


Gay Talese ha firmado su despedida con un libro a la altura de su trabajo periodístico. Con 92 años, y después de “Frank Sinatra está resfriado” y “Nueva York, ciudad de cosas inadvertidas”, dos relatos de lectura indispensable para la formación de cualquier periodista; después de una decena de libros de no ficción, entre ellos Honrarás a tu padre, sobre la mafia de Nueva York, o El motel del voyeur, que cuenta la vida de un espía de parejas sumado al magnífico documental que da cuenta de la construcción y derrumbe de un artefacto periodístico que tardó más de dos décadas en elaborar, Talese se retira de las pistas con Bartleby y yo, en el que da cuenta de sus orígenes como reportero y la trastienda del oficio enfocada principalmente en el perfil sobre Frank Sinatra.

No es la primera vez que lo hace. A través de los años, ha dado entrevistas memorables en las que comparte sus métodos y obsesiones, como aquella con Robert S. Boynton recogida en El nuevo nuevo periodismo (2005), pero acá todos esos recuerdos se articulan de manera secuencial, y siempre con la misma premisa: el periodista debe ser una mosca en la pared.

Se trata, a fin de cuentas, de la vida de un hombre convertido en reportero que siempre puso un ojo en los personajes de segunda línea, en los anónimos, en aquellos que pasan por nuestro lado sin que nadie le preste mayor atención. No por nada, el subtítulo en la edición original es Reflexiones de un viejo escribiente, en directa relación con Bartleby, el personaje creado por Herman Melville y que Talese bien describió en una entrevista publicada por Gatopardo el mismo día que terminó el libro:

“Es la historia de un escribiente del que no sabes nada, como mucha gente que ves en tu vida promedio, en una farmacia, en un restaurante, en un centro comercial, en un bus, y no sabes su nombre ni su apellido. Cuando era un joven periodista, a los veintiuno, veintidós, decidí escribir sobre los nadie. En las noticias escribes sobre un político, un héroe deportivo, una estrella de cine, un líder empresarial. Escribes sobre alguien. Yo quería escribir sobre nadie”.

Aunque no se trata estrictamente de sus memorias, pues incluye una crónica inédita sobre un médico que voló el edificio donde vivía, el volumen tiene momentos entrañables, como el recuerdo de aquellas crónicas que no encontraron editores interesados en publicarlas.

Si el documental El motel del voyeur da una gran lección de periodismo y de los riesgos de trabajar con historias reales, es la sinceridad de Talese, al reconocer que las imperfecciones del oficio son acaso su principal atributo, lo que convierte a este libro en una obra de consulta permanente, de esas que se tienen por siempre en el velador.

Bartleby y yo de Gay Talese. Alfaguara, 2024

También te podría interesar:
Guevara M.R.