Catalina Gaete es periodista, egresada de la Universidad de Chile y cofundadora del medio de comunicación La Pública, el cual tiene como objetivo promover el uso de la Ley de Transparencia y mostrar el impacto que tiene el acceso a la información a través del periodismo de investigación en todos sus formatos. En conversación con Doble Espacio la periodista radicada en Europa, reflexionó sobre la importancia de esta normativa legal, el aporte de su medio a la sociedad civil y las proyecciones que tiene el mismo.


¿Cómo surge la iniciativa de La Pública?

Este proyecto tiene más años que la pandemia sí. La pandemia y el Estallido Social fueron la mecha para poder decidir salir al aire, pero la idea de La Pública nace en 2017 con el triunfo que tuvimos en Corte Suprema, un caso bien emblemático para nosotras, pero también para el país, que fue la liberación de las actas del Consejo de Seguridad Nacional, que fueron pedidas por primera vez el año 2015, las pedí yo.

Nunca antes se había solicitado esta información y fueron denegadas por los militares, que en este caso es el Estado Mayor Conjunto el que los tenía. Pero también cuando se enteró el resto de la plana política y los medios de comunicación tradicionales hubo una negativa, un rechazo generalizado a dar a conocer estas actas, a liberarlas, desde la izquierda, desde la derecha, en ese entonces la Concertación y la derecha en Chile Vamos.

Hubo editoriales de El Mercurio, notas de prensa diciendo cómo esto podría afectar al país y a la seguridad de la nación, el conocer estos documentos históricos para Chile. Mientras que el Consejo para la Transparencia insistía en que estos documentos contribuían a la memoria histórica del país.

Bueno, después de dos años de juicio, que llegamos hasta Corte Suprema, que es el principal tribunal del país, se ordenó la entrega, o sea, se entregaron estos documentos, y me los entregaron a mí.

Y aquí viene la idea inicial de La Pública, porque en ese momento yo me vi con 500 páginas de la historia de Chile, muchas de ellas escritas a mano. Las actas del Consejo de Seguridad Nacional parten con la dictadura, parten con Pinochet a la cabeza de la mesa y continúan por toda la transición. Y tenía estos documentos en mi computador, y yo en ese momento estaba estudiando un magister en Holanda, no tenía el tiempo para poder trabajar en ellos, leerlos, darles el tiempo que requerían, entonces ahí dije: “Necesitamos compartir esta información. Alguien más tiene que poder acceder a ella y no solamente yo.”

Así que ahí nace la idea de un Archivo Ciudadano, que es un repositorio de respuestas de transparencia que no existe en Chile, pero que, si está en otras regulaciones, en otras leyes de transparencia del mundo. Entonces vi ejemplos, trabajé en una ONG en España que tenían ejemplos de este tipo en donde antes de que tú hicieras la solicitud, tú pudieras ver todas las solicitudes que hay disponibles.

Entonces usando eso como referente pensamos en el Archivo Ciudadano. Contacté a Paulette Desormeaux, que es una periodista, tallerista, que entrena a periodistas en investigación a lo largo de América Latina, y juntas empezamos a crear esta idea de que más allá del Archivo Ciudadano.

Tenemos que además mostrar qué es lo que hacen estos documentos, las puertas que se pueden abrir cuando accedemos a este tipo de información, y así es como combinamos el acceso a la información con el periodismo y el trabajo de crear historias finalmente.

En ese momento estaba todo lo de WikiLeaks, el liberar información de forma masiva. Ya habían ocurrido en ese momento los primeros Panama Papers, en donde había mucha documentación disponible, pero nos dábamos cuenta que la abundancia de información también contribuye a la desinformación porque si no hay periodistas, especialistas o historiadores, cientistas políticos, personas que sean capaces de darle sentido a esa información, las personas finalmente terminan desinformadas.

Entre el estallido y la Pandemia

Catalina Gaete recuerda que cuando comenzó la pandemia del Covid-19, estaban en pleno proceso de configurar el archivo y su medio, y detalla lo que vivieron en ese momento y pocos meses antes, cuando se inicia la revuelta social en Chile.

Fuimos a la International investigative journalism Conference que fue en ese momento en Hamburgo, en Alemania. Fuimos a presentar al Archivo Ciudadano en ese momento, contando que esta podría ser una herramienta, un repositorio para periodistas no solamente en Chile, sino que América Latina. Y estábamos en eso, como dando a conocer lo que era el Archivo Ciudadano y La Pública, cuando ocurre el Estallido. Y fue con el Estallido con lo que finalmente sentimos la urgencia, porque empezamos a hacer solicitudes de acceso a la información de forma sistemática.

Todos los días estábamos pidiendo información a partir de lo que veíamos en la prensa, en redes sociales. Y así por ejemplo surgió la solicitud que hoy día nos ha dado más reconocimiento, que es la de las cámaras corporales de Carabineros, porque veíamos cómo las personas a través de redes sociales denunciaban abuso policial, denunciaban por ejemplo estas detenciones que parecían secuestros.

 

Catalina y Paulette

 

 

Y vimos, bueno esto ya hay que contarlo, ya hay que empezar a hablar de esto. Así fue como trajimos al equipo a un practicante, a un estudiante de periodismo. El primero, que fue Claudio Cifuentes, nos ayudó también a conformar la idea de La Pública, que habláramos con periodismo visual, qué tuviéramos a un personaje, trajimos ilustradores y de esa forma se empezó a crear este equipo inicial, siempre con Paulette y yo liderando este proceso.

Y de ahí en adelante hemos tenido practicantes, tenemos dos periodistas más o menos fijos, todos hasta ahora trabajamos de forma voluntaria porque estamos buscando financiamiento, pero es un mercado competitivo el de buscar financiamiento. Tenemos cuatro ilustradores, quienes son los que crean y dan vida a Amparo (personaje ficticio que es protagonista de las historias visuales de La Pública).

 

¿Cuál es el sistema para ingresar las solicitudes mediante Ley de Transparencia y para procesar la información que tienen?

Ahí tenemos por ejemplo esta división entre el trabajo de acceso y posteriormente el trabajo de crear las historias, más el trabajo de armar el reportaje, armar la investigación, porque creemos que todo lo que hacemos, desde pedir la solicitud, o de encontrar un tema para solicitar algo ocupamos nuestro saber periodístico.

Entonces lo que hacemos es: Paulette está de la parte periodística, yo estoy encargada de la parte de Acceso a la Información. Yo estoy constantemente ingresando solicitudes de acceso a la información, todos los días, todas las semanas. Si veo algo que aparece en la prensa, nuevamente cosas que ocurren en redes sociales, o la gente a estas alturas ya nos sugiere cosas que pedir, por ejemplo, lo que pasó en las elecciones de segunda vuelta que no había disponibilidad de transporte público. Bueno, pedimos el número de micros que había disponibles ese domingo, pero también los que ha habido disponibles durante todos los domingos del año para hacer una comparativa.

Hemos pedido también iniciativas propias, como la cantidad de personas extranjeras migrantes que han muerto en Chile, porque habíamos visto en las noticias a partir de lo que ocurre en Tarapacá, que hay muertes en extrañas condiciones que pueden estar relacionados con tráfico de personas. Entonces en general vamos viendo lo que ocurre en la cotidianeidad a partir de nuestra intuición periodística, y vamos ingresando solicitudes.

Las solicitudes se van respondiendo y aunque no te puedo decir la cifra exacta, pero tenemos más de 400 solicitudes ingresadas y funcionando, muchas de ellas están con Corte. Tenemos más de 100 casos en el Consejo para la Transparencia, cinco al menos en Corte de Apelaciones, entonces todas esas hay que darles seguimiento y ese es el trabajo que hago yo junto a con los practicantes que están trabajando. Y posteriormente, cuando recibimos información o cuando recibimos una denegación importante, Paulette está a cargo de construir la historia.

¿Qué es lo que podemos contar de este documento, de este material que recibimos, o de esta denegación? por si nos deniegan por ejemplo algo muy relevante, o si nos llevan a Corte, que es lo que pasó con Astrazeneca, que pedimos todos los contratos de las vacunas y solamente Astrazeneca nos llevó a la Corte de Apelaciones porque el Consejo para la Transparencia dijo que había que entregarlo, eso hay que contarlo porque, da cuenta de una denegación de acceso o de una percepción de lo que es el acceso a la información que hay que comunicar, hay que contar.

 

¿Cuál creen que ha sido el alcance que ha tenido La Pública en este tiempo respecto al uso de la Ley de Trasparencia?

Definitivamente el mayor impacto ha sido que las personas están haciendo uso de la Ley de Transparencia, que la están viendo, idealmente ya no como una herramienta jurídica, lejana, de difícil acceso, sino que una herramienta que efectivamente fue creada y fue concebida para las personas, para que puedan utilizarla en los más diversos fines, o sea no tiene que ser para el periodismo solamente.

“(La Ley de Transparencia) Puede ser para una persona que ve que en el patio de su casa se está haciendo una construcción y no tiene idea de qué es, o en qué está relacionada, y ahí va a preguntar y no le dicen, bueno, que sepa que la Ley de Transparencia es una herramienta que pueda utilizar para pedirle a su propio municipio, que le explique, que le rinda cuentas de qué están haciendo en el patio de su casa.”

Nuestro objetivo es promover el uso ciudadano de la Ley de Transparencia, y en ese sentido no somos un medio objetivo, no somos imparciales frente al acceso a la información, creemos y promovemos el acceso, creemos en él y por lo tanto lo vamos a defender en diferentes instancias.

Por lo tanto, no tenemos ninguna objetividad al respecto. Y también nuestro objetivo es ciudadano, es un servicio también, no solamente el periodismo como “Yo entrego información y listo”, sino que necesitamos estar constantemente escuchando a las personas para saber qué tipo de información requieren y construimos las solicitudes también muchas veces sobre las bases de sus percepciones, de la ciudadanía. Tenemos que estar constantemente con orejas y ojos bien abiertos para poder hacer bien nuestro trabajo.

 

La Pública y las instituciones como Carabineros

La fundadora de La Pública, señala estar feliz por el trabajo del medio y su impacto el cual  corroborado, tanto a nivel del uso de la Ley de Transparencia por todas las personas y en particular en el tema de las instituciones policiales.

Y en ese sentido hemos tenido casos muy fuertes, particularmente el tema de Carabineros nos hemos centrado mucho porque tenemos dos años de una historia bien compleja con esa institución. Hay instituciones más complejas que otras, y en este caso ha sido Carabineros porque muchas personas han llegado a pedirnos ayuda para poder pedir información a carabineros porque han tenido alguna experiencia de abuso policial, de detenciones arbitrarias, de violencia derechamente.

O sea, tenemos el caso de Daniel que nos pidió ayuda para poder solicitar información porque había recibido un disparo en su espalda de 12 perdigones, que todavía tiene 10 en su espalda, no se los pueden remover porque están muy cerca de la columna y vio nuestro reportaje de las cámaras corporales y dijo: “Bueno, para que avance mi caso en la justicia que está completamente detenido en Fiscalía, a lo mejor yo también puedo aportar.”

Entonces nos pidió ayuda, se comunicó con nosotros, le ayudamos a redactar su solicitud y al final del camino, esa solicitud no funcionó, fue denegada. Pero descubrió que fue el Claudio Crespo el mismo carabinero que disparó por la espalda contra Gustavo Gatica. Entonces ese tipo de casos vemos el impacto que tiene nuestro trabajo, y más que nuestro trabajo la Ley de Transparencia.

 

“Es una herramienta muy poderosa para las personas porque nos permite exigir a las autoridades rendir cuentas, y si la ocupamos todos y todas, podemos avanzar, tanto para el beneficio personal como para la ciudadanía completa.

¿Cuáles son las críticas hacia el sistema de la Ley de Transparencia?

En primer lugar, he trabajado y estudié en Holanda, en Dinamarca, vivo en Alemania, tengo como la perspectiva desde afuera. Paulette también ha trabajado en muchos países de América Latina, y vemos que la Ley de Transparencia chilena es una de las más potentes del mundo, es una de las que está mejor evaluadas por los distintos tipos de indicadores. Por ejemplo, tiene un organismo autónomo que revisa las causas: El Consejo para la Transparencia, eso no está en todas partes. Por lo tanto, hay un organismo que vela por nuestros derechos de acceso y eso es algo bueno.

Entonces la ley chilena efectivamente costó mucho que saliera, hubo mucho lobby, mucho trabajo por parte de organizaciones de la sociedad civil buscando esta ley, y que además viene del caso Claude Reyes versus Chile, que viene de una sentencia de una corte internacional diciéndole a Chile que debía ajustar su sistema interno para asegurarle a sus ciudadanos el acceso a la información.

Creo que quiero partir con eso respecto a nuestras opiniones sobre la ley, es en comparación al resto del mundo, y en comparación a América Latina por sobre todo, es una ley que sirve, que funciona.

Las críticas que podemos hacer a ello, por supuesto, que no aplique para el poder judicial y el poder legislativo es sin duda un problema. El que no aplique para las empresas del Estado, es un problema. Pero esas todas han sido cosas identificadas ya, que incluso los legisladores saben que eso es algo en lo que hay que avanzar en esta “Ley de transparencia 2.0”.

Lo que sí podemos decir como crítica y que hemos visto con nuestro trabajo, es que, durante los últimos años, desde el Estallido Social y la pandemia, ha habido una interpretación restrictiva de los organismos del Estado respecto de la ley.

El Ministerio de Salud en los últimos dos años simplemente no responde. Más cuando se trata de Covid. Y eso lo vimos en uno de nuestros reportajes, vimos los datos abiertos del Consejo para la Transparencia, sacamos todas las denegaciones del Ministerio de Salud y vimos que cuando se trata de solicitudes relacionadas a la pandemia es en un porcentaje esas son las que no se responden. Entonces la no respuesta también es muy complicada.

Y lo último a lo mejor son las estrategias evasivas que han tenido algunos organismos para no responder a solicitudes, por ejemplo, pelotearse entre organismos, lo que desincentiva. También pedir subsanaciones muy seguido, “Es que yo no entiendo lo que está pidiendo, explíqueme y tiene cinco días hábiles para responderme.”

Pero si te das cuentas, todas las críticas van al uso de la ley, o la interpretación que tiene la ley de los organismos del Estado y no de la propia ley. La normativa permite muchas cosas, da acceso a muchas cosas, pero si se interpreta restrictivamente, o si se mal utiliza, o si les da lo mismo a los organismos; si no creen en sus propios departamentos de transparencia al interior, si ellos no creen en la transparencia, bueno, van a encontrar todas las estrategias para denegar, en vez de dar acceso.

 

Recibieron una mención honrosa en el premio “Javier Valdéz” de la Colpin por el reportaje en base a la información de las cámaras corporales de Carabineros ¿Qué significó este reconocimiento para ustedes?

Si, para nosotras este premio, este reconocimiento, una mención honrosa en la premiación de periodismo de información de América Latina más importante, es sin duda un reconocimiento después de tan sólo un poquito más de un año de trabajo, con personas que trabajan de forma voluntaria. O sea nos da el motor y la motivación que necesitamos para continuar y también para ir a buscar financiamiento y para decirle a organismos, a financiadores, o a las mismas personas, que nuestro trabajo vale la pena financiarlo, porque si hicimos esto sin dinero, imagínese lo que podemos hacer con financiamiento. Entonces para nosotras es muy importante el poder darle un impulso para que La Pública se sostenga y continúe trabajando.

Este reportaje en realidad es uno de tres reportajes, porque esta fue una serie que publicamos en octubre del año 2020, con la información que obtuvimos de la solicitud que ingresamos la primera semana de noviembre del 2019. O sea, mientras esto estaba pasando en las calles, nosotras estábamos ingresando solicitud. Y fue por supuesto la respuesta al cabo de 10 días hábiles fue una denegación, por lo tanto, después este proceso fue al Consejo para la Transparencia, esta solicitud y se demoró nueve meses finalmente en salir la decisión.

Y ahí pudimos ver como Carabineros para negar acceso a los videos de sus cámaras corporales, que todos los funcionarios deben portar, y desde el 11 de noviembre de 2019, deben portar de forma obligatoria si es que están utilizando escopeta anti disturbio, o cualquier tipo de arma anti disturbios. Por lo tanto es información pública, por lo tanto cumplía con todos lo requisitos para ser información pública, pero fue denegada porque Carabineros dice que no pueden difuminar los rostros de las personas que aparecen en los videos, ya que uno de los artículos de la Ley de Transparencia de transparencia dice que hay que proteger los datos personales de las personas.

Completamente correcto y de acuerdo, nosotras creemos que deben hacerlo, pero al decir que no los pueden difuminar, finalmente está “escapándose con los tarros” de alguna forma, y diciendo: “No, no se puede, así que no lo entregamos.” Pero fuimos al Consejo para la Transparencia, el Consejo revisó el caso y Carabineros dijo: No tenemos la capacidad técnica para hacerlo. Bueno, el Consejo le dice: Va a tener que encontrar alguna forma.

Y así fue como nosotros empezamos a buscar de qué forma lo pueden hacer, y fuimos a Mercado Público a ver las contrataciones, o sea todas las fuentes que nosotros utilizamos son fuentes abiertas, utilizamos Merca Público, Info Lobby para ver las reuniones de Ley de Lobby, todas las plataformas que se han creado a partir de estas diferentes leyes de probidad y acceso a la información son las plataformas que nosotros utilizamos.  Vimos que Carabineros había contratado un software que se llamaba evidence.com, millonario, más de 500 millones se gastaron solamente en el software, se capacitaron a funcionarios, se enviaron a otros países a capacitarse, para utilizar este software, y una de las características de este software es que puede hacer difuminado automático de rostro.

Entonces lo que finalmente lo que concluimos es que Carabineros le mintió al Consejo para la Transparencia, que no dijo las capacidades técnicas que realmente tenía, y que por lo tanto esta información si podía ser difuminada. Al cabo de unos meses llegan los videos, que en ese momento eran 200 minutos de grabación y al revisarlo efectivamente corroboramos como muchos de los protocolos del uso de la fuerza no se estaban cumpliendo.

Y ahí, como ves, todo el proceso de acceso es uno, pero después cuando ya tenemos la información vienen los periodistas que haciendo entrevistas, ocupando la metodología regular de investigación periodística comprueban, encuentran información relacionada, por ejemplo, revisaron todos los protocolos del uso de la fuerza, lo leyeron uno por uno y vieron que no se cumplía, por ejemplo, en el caso de disparo de escopeta que estaban siendo a noventa grados, deberían ir hacia los pies.

Y eso por supuesto lo contrastaron con expertos para que les dijeran: Si, efectivamente ese| disparo está fuera de protocolo, o el tirar gas lacrimógeno que no está oponiendo resistencia también está fuera de protocolo.

 

¿Cuáles ha sido los principales hallazgos desde el inicio del proyecto?

Para hacer solicitudes de acceso a la información, y por eso yo creo que hemos desarrollado una expertiz a este punto, porque hay que tener creatividad. Y, por ejemplo, ya que todo el Estado estaba teniendo reuniones por Zoom durante la pandemia, queríamos ver los videos de las reuniones, o sea, todo el Estado está teniendo reuniones por Zoom, por lo tanto, todas las grabaciones, las reuniones que han tenido tiene que estar registradas, entonces pedimos grabaciones.

No sabíamos como pedir esta información. Ingresamos simplemente la solicitud pidiendo videos y todas fueron denegadas. Entonces dijimos “¿Cómo más lo hacemos?”.  Nos metimos a la plataforma de Zoom a ver cómo funcionaba, y descubrimos que en la empresa Zoom, cuando uno contrata la versión pro, viene con informes de uso, que es un archivo Excel que se genera de forma automática y que contiene toda la información de todas las reuniones.

Así que pedimos los informes de uso de Zoom, agregando en la solicitud “Ruego considerar que esta información está, según la plataforma de uso Zoom, contenida y por lo tanto viene, es así.” Y buscamos en Mercado Público todos los organismos que contrataron Zoom pro, y se los pedimos a ellos.

Y bueno, nos denegaron, fuimos al Consejo para la Transparencia y el Consejo ordenó entregar los informes de uso. Y ahí pudimos ver por ejemplo reuniones no informadas en Ley de Lobby, que fue algo igual interesante, una forma de llegar por otro lado a la información que estábamos buscando.

 

¿Cuáles son sus proyecciones como medio de comunicación?

Nuestra principal proyección es la sostenibilidad del medio. Ningún medio se comunicación profesional puede sobrevivir sin que sus periodistas sean pagados, que sus ilustradores que nosotros tenemos estrellas de ilustradores que trabajan también de forma voluntaria, pero sabemos que no se puede sostener para siempre.

Queremos mantener nuestra independencia, por lo tanto, esperamos que ese financiamiento pueda ser a través de aportes de las personas a través de grands o de becas que entregan algunos organismos internacionales, y finalmente alguna estrategia en donde no tengamos que recurrir a publicidad, o auspiciadores. Entonces tenemos que estar generando campañas de donaciones y de membresía, donde la gente pueda ser parte de esta comunidad de acceso a la información.

Estamos en ese trabajo y nuestra visión de este medio es que pueda ser un referente para las personas, por ejemplo, para los periodistas, para que, si están buscando una información y no saben dónde, bueno, que recurran al Archivo Ciudadano de La Pública, para que las personas comunes y corrientes puedan seguir viendo nuestras publicaciones, y decir: Yo puedo pedir esto en mi propia comunidad, o en mi propia situación. O sea, básicamente que podamos extender, expandir y mantener lo que ya estamos haciendo.

Catalina Solís

Estudiante de Periodismo de la Universidad de Chile.